Hace mucho tiempo
que no soy yo...
No puedo ser
esa figura altiva
que no sonríe, que no cede
que ni siquiera
reconozco en el espejo
cuando la observo
y ella, gira la mirada
No puedo ser
esa que conjura
espíritus silentes
la espectadora de omisiones
esa mujer circunspecta
que en levedad me arrastra
a una amnesia sacra
No puedo ser
roulotte de invierno
ataviada de capullos renegridos
o una codicia ausente
de una causa justa
Sé quien soy
(en el mejor de los casos)
cuando me olvido de mi
y me anuncio con firmeza
Soy una extraña
contadora de sueños
en noches de miedo,
en horas tenebrosas,
que cierro la ventana consabida
Si...
a veces, sé quien soy
Cuando un resoplo
de cordura
cruza una esquina
de las entrañas
y la memoria me recuerda
que floto en las aguas mansas
del crepúsculo de una lagrima
Sé quien soy...
pero a veces
(como ahora...)
¡no me importa!
C.R.N.(2012)
Derechos Reservados
ESPAÑA
Celsy,
ResponderEliminarTodos tenemos tantos rostros como minutos de vida… Las circunstancias y el tiempo –que nunca perdona- hacen que variemos, que nos reconozcamos, pero somos los mismos.
Lo digo con conocimiento de causa, cuando deslizándome por tus –hermosos versos- he reconocido mis temores y yo misma frete al espejo. Mañana publicaré una poesía al respecto. Somos almas gemelas de pensamiento sin apenas conocernos. Muchos besos, poeta de la soledad: eres una de las mejores.
Besos amiga,
Ann@